Superintendencia de Industria y Comercio
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La educación enfocada al tema de propiedad intelectual busca nuevos espacios para que las personas puedan tener mayor acceso, entender mejor qué son las creaciones de la mente y cómo influir en el crecimiento e innovación de éstas.
En palabras de Francis Gurry, Director General de la OMPI:
La creciente independencia de nuestras sociedades ha hecho, además, que la innovación y la creatividad se conviertan en un valor internacionalmente reconocido, una forma de moneda común. Una moneda que proporciona múltiples ventajas, no solamente en sí misma sino también en los beneficios que puede generar. Así, el sistema de P.I. es una fórmula hallada casi de forma natural, en los países y entre ellos, para fomentar el desarrollo de esa moneda, gestionarla y protegerla.
Ahora bien, en el caso concreto de la propiedad industrial las distintas instituciones a nivel mundial que buscan proteger e incentivar el uso de patentes, marcas, diseños industriales y demás modalidades de protección de activos empresariales por esta vía, entienden que “saber es poder” (Gurry, 2000) y que las personas entre mayor conocimiento tengan en relación a la PI, mayor será su compromiso con la innovación.
En Colombia, la Superintendencia de Industria y Comercio es la entidad encargada, entre muchas funciones, de velar por la relación entre la población colombiana y la propiedad industrial. Precisamente, frente a la necesidad de cubrir los intereses enfocados en la formación del ciudadano sobre los distintos aspectos de la PI nace API, el Aula de Propiedad Intelectual de la SIC. Esta es una herramienta orientada a promover la protección, el uso y el aprovechamiento del sistema nacional de propiedad industrial.
En esta misma línea, es importante resaltar que API va de la mano con el desarrollo académico global. Es decir, que esta herramienta se suma al fenómeno de formación virtual; aunque no niega que las metodologías presenciales son igual de importantes, entiende que la educación virtual es el camino a un futuro de mayor accesibilidad e igualdad para todos.
Según Martha Lucia Acevedo, Profesional del Aula de Propiedad Intelectual, “la educación virtual es una revolución que ya no tiene marcha atrás. De la misma forma que no la tienen el teléfono, la radio o la televisión, porque las nuevas tecnologías vinieron para quedarse y evolucionar, y la educación virtual forma parte de ellas.”
En ese orden de ideas, el E-learning[1] dejo de ser un reto y se convirtió en una realidad. Se podría decir, entonces, que toda institución u organización con áreas de formación tiene la obligación de crear espacios digitales para llegar a todos los públicos.
La educación se reinventa y se construye entre todos, dado que ya no se piensa en clases donde el profesor es el único con el conocimiento, sino que cada una de las personas dentro de los cursos puede –y en lo posible debe- aportar de manera crítica el material que se dan en las aulas, por medio de funciones como los foros.
Creación de metodologías mixtas, el e-learning abre la posibilidad de adquirir conocimientos virtuales y presenciales. Ejemplo de esto es API (mencionado anteriormente). De este modo, la educación se vuelve más completa y eficaz.
Asimismo, un aspecto para resaltar es la relación reciproca que hay entre la P.I. y el e-learning, porque la segunda es consecuencia de años de desarrollo de la primera, pero, en este momento, la educación virtual se ha convertido en uno de los aspectos más revolucionarios para adentrarse en el maravilloso mundo de la propiedad industrial.
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